Carta de Lila

El amor en los tiempos de K

El, querido mío:

Salgo de mi voluntaria reclusión para enviarte unas palabras que ya conoces, antes de leerlas.

Mayor el don, más cruel la maldición. Sólo somos una hebra, y un avatar. En tiempos de K, cada quien debe llevar su carga.

No te culpes. Desamor, negligencia, rispidez: es tiempo de K y debes pagar por lo que recibiste con la herida sangrante que te comunica con todo y que te permite ser.

Sin embargo, tus latidos se escuchan en las noches quietas y tal vez, tal vez, sea posible resistir los instantes humanos que aún quedan por delante.

Amorosamente,

Lila